Impresionantes imágenes muestran la batalla en las llanuras entre cuatro leonas hambrientas y una pesada manada de búfalos negros salvajes.
Los grandes felinos son vistos acechando a su presa antes de separar a dos de su grupo; luego, comienzan la rápida persecución.
Pero cuando una de las leonas se lanza para matar, su némesis de media tonelada patea, alcanzándola limpiamente en la cabeza.
Habiendo ganado la primera batalla, la manada de búfalos luego cambia las tornas y carga después de las aterrorizadas leonas que huyen.
Estas increíbles fotos muestran el momento en que una leona va a por la presa, un búfalo desprevenido, pero la astuta bestia de media tonelada tiene otros planes.
Las leonas hambrientas acechaban a una gran manada de búfalos, y cuando dos se separaron del grupo, los grandes felinos hicieron su movimiento y atacaron.
Pero el búfalo respondió igual de fuerte, pateando a la leona antes de que toda la manada se le uniera y persiguiera a los depredadores.
Toma eso: Un búfalo, separado de su manada, se defiende contra una leona que lo había marcado como almuerzo. Mientras el depredador se lanzaba para matar, recibió una fuerte patada en la mandíbula… antes de que las tornas cambiaran por completo.
Te tendré a ti en su lugar: Entonces el búfalo fue tras la leona, persiguiéndola mientras intentaba hacer una desesperada escapada.
De vuelta al punto de partida: Dos de las magníficas bestias se reagrupan en terreno más seguro después de su intento fallido de atrapar un almuerzo considerable.
Las increíbles escenas fueron capturadas en cámara en el Cráter de Ngorongoro en Tanzania, África.
La fotógrafa Julia Sundukova dijo: “Decir que estaba emocionada es quedarse corto.
Era una tarde lluviosa, y tuve la suerte de presenciar el inicio de la caza: nueve leonas, una de ellas embarazada, se dirigieron hacia un enorme grupo de búfalos.
En acecho: Cuatro leonas son fotografiadas juntas en el Cráter de Ngorongoro de Tanzania mientras comienzan su caza de alimentos.
Objetivo: Las leonas hambrientas acechaban a una gran manada de búfalos, y cuando dos se separaron del grupo, hicieron su movimiento.
La carrera está en marcha: Después de separar a un solo búfalo, una de las leonas comienza la persecución, corriendo tras la bestia de media tonelada a través de la pradera.
Salida en falso: Con sus patas delanteras extendidas y garras afiladas aferrándose, la leona hace su mejor esfuerzo para detener a su presa. Sin embargo, el búfalo responde con su propio ataque, pateando con su pata trasera.
“Después de algún tiempo, cuatro leones aparecieron entre los arbustos: estaban cálidos y adormilados, listos para tener una buena cena.
“Cuando se dieron cuenta de que las leonas no habían atrapado ningún búfalo, no estaban muy contentos; intentaron nuevamente atrapar algo de cena, pero los búfalos las volvieron a alejar.
“Nueve leonas y tres leones no lograron atrapar ningún búfalo; fue muy impresionante y hermoso de ver”.