Este osito débil no podía cruzar la calle con su familia, pero un humano lo ayudó, captado en un conmovedor video

A veces solo necesitamos un pequeño empujón para poder llegar a donde queremos estar. No importa la edad que tengamos.

Y tampoco importa si estamos cubiertos de piel o de pelo. Eso fue lo que aprendió un pequeño oso.

Mientras cruzaba la calle con su madre y sus hermanos, un lindo osito luchaba por mantener el ritmo. Aunque su familia trataba de animarlo, parece que al final decidieron que lo mejor era seguir adelante sin él. Sin embargo, había alguien más por ahí cerca que decidió brindarle algo de ayuda al pobre osezno.

Un oficial de policía estaba viendo a los osos mientras cruzaban. La madre tuvo que regresar una y otra vez para animar a sus crías a seguirla, pero se dio cuenta de que no iba a poder hacerlo por mucho tiempo más. Sin embargo, el oficial estaba decidido a echarle una mano.

 

Llevó al osito a una clínica de rehabilitación cercana, para que lo cuidaran y le sanaran sus heridas. El objetivo final era reintroducirlo en su entorno natural después de recibir un tratamiento exitoso. Una vez liberado, solo podemos esperar que sea capaz de encontrar el camino de vuelta a su familia, para disfrutar de una maravillosa vida de oso joven y, con algo suerte, criar a sus propios cachorros.

Es una pena que este oso no haya podido seguirle el ritmo a su familia. Sin embargo, es una bendición que este oficial de policía estuviera allí para cuidar de él. Gracias a la rehabilitación y, con un poco de suerte, tal vez logre reunirse con sus parientes.