Mientras que Carrie Bradshaw de Sex and the City ha entrado en la imaginación popular por su impresionante colección de zapatos y su conocimiento de la moda, pocos saben que el joven rey Tut también disfrutaba de una vasta colección de calzado.
El sorprendente hallazgo de la tumba KV62 de Tutankamón por Howard Carter, uno de los descubrimientos más emocionantes jamás realizados por egiptólogos, capturó titulares en todo el mundo en la década de 1920. Mientras que su máscara de oro funeraria se ha convertido en un símbolo icónico del antiguo Egipto, solo fue en 2007 cuando los expertos emprendieron un estudio exhaustivo sobre el calzado del rey.
Si bien el número exacto de sandalias no está claro, se descubrieron al menos 80 muestras en la tumba prácticamente intacta del rey Tut, incluidas para acompañarlo en la vida después de la muerte. Mientras que algunas se descubrieron en sorprendentemente buen estado, todo lo que quedaba de otras eran pequeños fragmentos de correas para los pies. Las mejor conservadas fueron las sandalias de oro descubiertas en los pies de la momia del rey Tut.
André Veldmeijer, un arqueólogo holandés y autor de “El Calzado de Tutankamón: Estudios del Calzado del Antiguo Egipto”, realizó el estudio de 81 muestras alojadas en el Museo de Luxor y el Museo Egipcio en El Cairo. Estas eran todo lo que quedaba de una amplia variedad de calzado sepultado con Tutankamón, una colección que incluía sandalias cosidas y sandalias de cuentas. En ese momento, habrían sido un festín para los ojos, hechos con oro, corteza de abedul, fibras vegetales, piedras preciosas, cuero y oro.
Las pruebas de ADN y el análisis de tomografías computarizadas de sus restos han revelado que el rey Tutankamón probablemente sufrió defectos congénitos causados por la endogamia, incluido un pie zambo y malformaciones en sus pies que habrían hecho que caminara con cojera y necesitara el uso de un bastón.
Entre la colección de zapatos descubierta en su tumba, se encontraron tres pares de zapatos que tenían correas horizontales debajo de los dedos de los pies que podrían haber sido creadas para ayudar a su marcha impedida. “Estas características no se conocen en ningún otro calzado, ya sea sandalia o zapato”, dijo Veldmeijer en una entrevista con Discovery News.
Lo que es aún más sorprendente es la representación de enemigos atados en más de un par de sandalias incluidas dentro de la tumba del rey Tut. Si bien los expertos no están seguros de si estas sandalias fueron realmente usadas o eran simplemente simbólicas, las suelas interiores de un par de elaboradas sandalias de chapa de marquetería representan a un prisionero africano en una sandalia y a un prisionero asiático en la otra, representando a los enemigos del reino del rey Tut. Teniendo en cuenta que las representaciones artísticas se utilizaban para manifestar la realidad en el antiguo Egipto, el mensaje era bastante claro. Cada vez que el faraón daba un paso, literalmente estaría pisando los rostros de sus enemigos.